
Este día, el papa Francisco recordó la masacre de las monjas Maryknoll, hecho sucedido en El Salvador hace 40 años. Y la cual está considerada entre las más brutales ejecutadas durante el periodo del conflicto armado en el país.
El 2 de diciembre de 1980, un grupo de paramilitares asesinó a las religiosas estadounidenses luego de haberlas violado. Además de a un laico misionero. A todos los señalaban de colaborar con la insurgencia.
Maura Clarke e Ita Ford eran de la orden Maryknoll. Mientras que Dorothy Kazel era de las Hermanas Ursulinas. Jean Marie Donovan era un misionero laico.
«Corrían muchos riesgos, llevaban alimentos y medicinas a los desplazados y ayudaban a las familias más pobres», dijo el Papa.