
El Servicio Secreto de Estados Unidos interceptó paquetes sospechosos, identificados como posibles dispositivos explosivos y enviados a las residencias del expresidente Barack Obama en Washington y Hillary Clinton en un barrio al norte de Manhattan.
Según la Agencia Francesa los paquetes fueron detectados durante un procedimiento de revisión rutinaria.
El medio también informó que la sede de CNN en Nueva York, en oficinas de miembros del Partido Demócrata en Florida, San Diego, habían hallazgo de otros paquetes.